La princesa Leonor, heredera de la Corona española, juró la Constitución del país ante las Cortes Generales, reunidas en sesión solemne en el hemiciclo del Congreso de los Diputados, el pasado martes 31 de octubre, día en que cumplió 18 años. Fue un acto histórico que simbolizó la continuidad de la Monarquía Parlamentaria y la protección del legado democrático que debemos garantizar.
La ceremonia comenzó a las 11:00 horas, cuando la familia real llegó al Congreso escoltada por el Escuadrón de la Guardia Real. Tras los saludos protocolarios, la princesa Leonor se dirigió al estrado, donde le esperaba un ejemplar de la Constitución de 1978 abierto por el título II, que regula la Corona. Ante un micrófono dorado, la heredera al trono pronunció las siguientes palabras: “Juro guardar y hacer guardar la Constitución como norma fundamental del Estado, así como guardar lealtad al Rey y a sus sucesores”. Acto seguido, besó el texto constitucional y recibió una fuerte ovación de los presentes.
Entre los invitados al acto estuvieron el presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, los presidentes del Congreso y el Senado, Meritxell Batet y Manuel Cruz, los miembros del Tribunal Constitucional, del Consejo de Estado, del Consejo General del Poder Judicial, del Tribunal de Cuentas y del Defensor del Pueblo, así como los líderes de los principales partidos políticos, los presidentes autonómicos y los alcaldes de las capitales de provincia.
Después del juramento, la familia real se trasladó al Palacio Real, donde el rey Felipe VI le impuso a su hija el Collar de la Real y Distinguida Orden Española de Carlos III, la más alta condecoración civil en España, que solo ostentan los reyes y los príncipes de Asturias. A continuación, se celebró un almuerzo oficial, al que asistieron unas 150 personas, entre las que se encontraban los invitados al acto anterior y otros familiares y amigos de la princesa Leonor. Fue en este momento cuando la heredera al trono pronunció su segundo discurso del día, en el que agradeció el apoyo de sus padres, de su hermana, la infanta Sofía, y de su abuela, la reina Sofía, a quien dedicó unas palabras muy especiales: «Me gustaría dar las gracias a mi abuela, la reina Sofía. Ella sabe lo importante que es para mí su presencia en mi vida, porque me ayuda a comprender mejor lo que significa asumir el compromiso que hoy he adquirido con la Constitución y con España».
La princesa Leonor también se refirió a su papel como heredera al trono y a su responsabilidad con los ciudadanos: «Les serviré con respeto y lealtad, con entrega y esfuerzo, con ilusión y con responsabilidad, con esperanza y con sentido de la justicia. Quiero contribuir a mejorar el futuro de todos, a defender nuestros valores democráticos, a preservar nuestro patrimonio cultural, a cuidar de nuestro medio ambiente y a ser solidaria con los que más lo necesitan».
La jornada concluyó con una cena familiar en el Palacio de El Pardo, a la que acudió el rey Juan Carlos I, que había viajado desde Abu Dabi para celebrar el cumpleaños de su nieta y felicitarla por su jura de la Constitución. Fue un reencuentro familiar que puso el broche de oro a un día inolvidable para la princesa Leonor y para la Corona española.
