El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha anunciado este lunes la convocatoria de elecciones generales para el próximo 23 de julio, tras los malos resultados obtenidos por el PSOE y sus socios del Gobierno en las elecciones municipales y autonómicas del pasado 28 de mayo. Sánchez ha comunicado su decisión al Rey Felipe VI en una audiencia celebrada en el Palacio de la Zarzuela y ha comparecido posteriormente ante los medios de comunicación para explicar los motivos de su adelanto electoral.
Sánchez ha reconocido que su Gobierno ha entrado en una situación de “bloqueo” y de “desgaste” que le impide seguir desarrollando su agenda política y social. Ha señalado que los resultados electorales han mostrado un retroceso del espacio progresista y un avance de las fuerzas de derecha y de extrema derecha, que han puesto en riesgo la gobernabilidad de muchas instituciones y la convivencia democrática. Ha afirmado que su objetivo es “reactivar” el proyecto político del PSOE y ofrecer a los ciudadanos una alternativa “clara, coherente y creíble” frente a las opciones conservadoras.
Sánchez ha defendido la gestión de su Gobierno durante los dos años y medio que ha estado al frente del Ejecutivo y ha destacado las medidas adoptadas para hacer frente a la crisis sanitaria, económica y social provocada por la pandemia de covid-19. Ha resaltado el papel de España en la Unión Europea y en el mundo y ha subrayado el compromiso de su Gobierno con la defensa de los derechos humanos, la democracia y el multilateralismo. Ha asegurado que su Gobierno ha sido el más “feminista, ecologista y social” de la historia democrática de España y ha reivindicado las reformas impulsadas en materia de educación, sanidad, pensiones, igualdad, justicia o memoria democrática.
Sánchez ha agradecido al Rey su papel institucional y su colaboración leal con el Gobierno durante estos años. Ha expresado también su reconocimiento al vicepresidente segundo, Pablo Iglesias, y a los ministros de Unidas Podemos por su trabajo conjunto en la coalición progresista. Ha afirmado que se siente orgulloso de haber liderado el primer Gobierno de coalición de la historia democrática de España y ha asegurado que seguirá defendiendo este modelo como el más adecuado para garantizar la estabilidad y el progreso del país.
Sánchez ha pedido a los ciudadanos que acudan a las urnas con ilusión y responsabilidad y ha confiado en obtener una mayoría suficiente para poder formar un Gobierno “fuerte, progresista y cohesionado”. Ha descartado cualquier pacto con las fuerzas de derecha y ha tendido la mano a los partidos que comparten su visión de España como un país “plural, diverso y solidario”.
